Como ave limícola que es, se encuentra siempre asociada a las manchas de agua del interior y a las zonas costeras. Encuentra su alimento, normalmente invertebrados, crustáceos o algún pequeño anfibio, en las riberas de ríos, lagunas y en playas costeras y de interior.
Y un ave de estas características, ¿dónde puede encontrar acomodo en nuestro municipio? Pues en el recién creado lago de las Presillas. Hace un par de días, en un paseo por esta zona, me llevé una gran sorpresa al encontrar una docena de individuos, moviéndose de un lado para otro huyendo ante le presencia de personas por la zona. Puede que se trate de aves en movimiento migratorio aún, aunque sería una excelente noticia si se quedasen a criar en este lago. Habrá que seguir observando en las próximas semanas.
Y a pocos metros de este avistamiento, la hembra del zampullín chico ya está preparando el nido donde nacerán en unas semanas una nueva generación de zampullines alcorconeros.
Ambas noticias, son una gran noticia para los amantes de la aves de Alcorcón. Esperemos que se sigan produciendo más y que podamos ver crecer esta laguna en cuanto al número de aves que alberga. Todos salimos ganando.
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